Nissen Laparoscópico
CIRUGÍA DE NISSEN LAPAROSCÓPICO
Rápido retorno a las actividades cotidianas, labórales y actividad deportiva
¿Qué es la cirugía antirreflujo laparoscópica?
Esto se consigue envolviendo el extremo inferior del esófago con la porción superior del estómago, llamada fundus, a manera de un manguito o chalina. Esto refuerza el esfínter esofágico inferior para que haya menos probabilidad de que el ácido vuelva al esófago. Si coexiste una hernia hiatal, se debe reparar el hiato esofágico para evitar que la hernia se vuelva a producir.
La cirugía laparoscópica de Nissen es realizada por el Dr. Dick Manrique de manera ambulatoria, es decir el paciente ingresa a la clínica, es intervenido en el quirófano, recuperado y regresado a su casa el mismo día de su operación, sin necesidad de ser hospitalizado.
¿Cuales son las ventajas de la cirugia de nissen ambulatoria?
La cirugía de Nissen Laparoscópica realizada de manera ambulatoria ofrece todos los beneficios de la cirugía mínimamente invasiva, al ocasionarle al paciente un menor trauma quirúrgico. Por tratarse de incisiones muy pequeñas, el dolor en el postoperatorio es mínimo comprado con el dolor producido por la incisión de la cirugía abierta. Esto permite al paciente una recuperación mas rápida de sus actividades habituales, además de un excelente resultado estético, al evitar grandes cicatrices en el abdomen.
Por otro lado, la cirugía de Nissen Laparoscópica Ambulatoria ofrece también las ventajas del manejo ambulatorio, como el menor riesgo de adquirir infecciones intrahospitalarias, al estar poco tiempo en contacto con el medio hospitalario, la reducción de los tiempos de incapacidad laboral, la obtención de niveles superiores de satisfacción del paciente y sobre todo, un ahorro muy importante en recursos económicos cuando se comparan con el sistema tradicional de hospitalización.
Estudios preoperatorios requeridos
El Dr. Dick Manrique solicita a todos los pacientes que deban ser operados de una cirugía de Nissen Laparoscópica Ambulatoria los siguientes estudios preoperatorios:
- Endoscopia Digestiva Alta: sirve para determinar la presencia de esofagitis y su grado de severidad, permitiendo la toma de una biopsia en caso de la presencia de esófago de Barret o de una hernia del hiato. Permite descartar la presencia de otras patologías asociadas como gastritis o úlcera gastroduodenal.
- Ph metría de 24 horas: este estudio permite medir la cantidad de ácido que existe en el esófago durante un periodo de 24 horas y determina si es normal o existe un exceso de ácido, o lo que es lo mismo, un reflujo gastroesofágico patológico. Es la mejor prueba funcional para el diagnóstico de la ERGE.
- Manometría Esofágica: es un estudio que permite valorar la motilidad esofágica y la presión del esfínter esofágico inferior, permitiendo descartar otras patologías como la acalasia y esclerodermia.
- Serie Baritada Esofagogastroduodenal: permite valorar la anatomía de la zona en caso de un esófago corto o de una hernia del hiato asociada.
- Ecografía de hígado, vesícula y vía biliares: sirve para descartar patologías que pueden ser causa de similar sintomatología, tales como colelitiasis (cálculos a la vesícula).
Preguntas más frecuentes
Aunque con frecuencia se usa la palabra acidez o ardor retroesternal para describir una variedad de problemas digestivos, en realidad se trata de un síntoma de la enfermedad por reflujo gastroesofágico. En dicha afección, los ácidos gástricos refluyen o “retroceden” desde el estómago hacia el esófago.
La acidez se describe como una fuerte sensación de ardor en el área del pecho y que puede ascender hasta el cuello y la garganta. Una parte importante de la población adulta padece de esta sensación de ardor al menos una vez al mes. Otros síntomas pueden incluir vómitos, dificultad para tragar, dolor torácico, tos crónica e incluso episodios de neumonías a repetición y broncoespasmo.
Al comer, los alimentos pasan de la boca al estómago a través del esófago. En el extremo inferior del esófago, hay un pequeño anillo muscular que se denomina esfínter esofágico inferior. El esfínter esofágico inferior funciona como una válvula de una vía, al permitir que pasen los alimentos en dirección hacia el estómago.
Normalmente el esfínter esofágico inferior se cierra de inmediato después de tragar a fin de impedir que retrocedan los jugos gástricos (que tiene un alto contenido de ácido) al esófago. El reflujo gastroesofágico ocurre cuando el esfínter esofágico inferior no funciona como corresponde y permite que el plácido retroceda y queme la porción inferior del esófago. Esto irrita e inflama al esófago y ocasiona la sensación de acidez, que si persiste en el tiempo, puede dañar el esófago e incluso procura una degeneración maligna conocida como Esófago de Barret.
Por lo general el reflujo gastroesofágico se trata en tres pasos progresivos:
A. CAMBIOS EN EL ESTILO DE VIDA
Existen una serie de medidas higiénico-dietéticas que permiten disminuir la frecuencia y severidad de estos síntomas: se recomienda la pérdida de peso en pacientes con sobrepeso y obesidad, evitar las comidas dentro de las 2-3 horas antes de acostarse, elevar la cabecera de la cama, restringir en la dieta aquellos alimentos que producen una disminución de la presión del esfínter esofágico inferior condicionando el reflujo, como el café, la menta, el chocolate, los alimentos condimentados o aderezados y las grasas. También es importante evitar el tabaco, el consumo de alcohol, las bebidas gasificadas y no tomar medicamentos antiinflamatorios sin prescripción médica.
B. TERAPIA FARMACOLÓGICA
Si persisten los síntomas después de estos cambios en el estilo de vida, es posible que haga falta una terapia farmacológica. Recomendamos el tratamiento con IBP (inhibidor de bomba de protones), una vez al día, de 30 a 60 minutos antes de una comida, durante 8 semanas.
Recomendamos intentar interrumpir los IBP en pacientes cuyos síntomas clásicos de ERGE respondan satisfactoriamente a un tratamiento empírico de 8 semanas con IBP y que continúen con las medidas higiénico-dietéticas. Recomendamos una endoscopia diagnóstica, que idealmente la realizamos después de suspender los IBP durante 2 a 4 semanas, en pacientes cuyos síntomas clásicos de ERGE no responden adecuadamente a un tratamiento empírico de 8 semanas con IBP o cuyos síntomas regresan cuando se suspende los IBP.
La terapia con algún medicamento procinético no será necesaria para la terapia de ERGE, a menos que haya evidencia objetiva de gastroparesia (ej. pacientes con diabetes mellitus, edad avanzada, etc.).
C. CIRUGÍA ANTIRREFLUJO
Recomendamos la cirugía antirreflujo como una opción ideal para el tratamiento a largo plazo en pacientes con evidencia objetiva de ERGE, especialmente aquellos que tienen esofagitis por reflujo gastroesofágico severo (Clasificación Los Ángeles grado C ó D), hernia hiatal grande y/o síntomas persistentes de ERGE.
La cirugía antirreflujo conocida como Cirugía de Nissen Laparoscópica es muy eficaz para el tratamiento del reflujo gastroesofágico y su manejo ambulatorio, la ha convertido como la mejor alternativa para el manejo de la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE).
Sugerimos considerar el Bypass Gástrico en Y de Roux Laparoscópico como una opción para tratar la ERGE en pacientes obesos que son candidatos a este tipo de procedimiento, ya que ademas de tratar el reflujo y el exceso de peso, se controlan otras enfermedades asociadas como la diabetes mellitus, hipertensión, dislipidemia, apnea del sueño, etc.
Existen algunos procedimientos endoscópicos que actualmente están en una etapa de evaluación clínica, entre los que se encuentran las técnicas de sutura por vía endoscópica (EndoCinch, NDO Plicator), la aplicación de radiofrecuencia en el esfínter esofágico inferior (Stretta) y la inyección endoscópica de materiales biocompatibles (Enteryx, GateKeeper, PMMA) que inhiben el reflujo gastroesofágico. Debido al corto periodo de seguimiento de estas técnicas nuevas, en el momento actual no se dispone de evidencia científica para demostrar que estos tratamientos sean mejores que la Cirugía de Nissen Laparoscópica.